WASHINGTON (BP) — La Corte Suprema de EE.UU. ha consentido en emitir un fallo sobre la legalidad de las órdenes ejecutivas del presidente Obama que detendrían la deportación de más de 4 millones de inmigrantes indocumentados.
Divulgadas en noviembre de 2014, las órdenes buscaban permitir que las personas indocumentadas que sean padres de ciudadanos estadounidenses o de residentes permanentes legales soliciten autorización para trabajar y los beneficios asociados. Texas y otros 25 estados liderados por republicanos demandaron invalidar el programa argumentando que el presidente sí “posee discreción para aplicar la ley” pero carece de “poder inherente para conceder presencia legal y elegibilidad a más de cuatro millones de extranjeros desautorizados,” dijo Texas en un sumario.
Un juez federal se puso de parte de Texas y de los otros estados demandantes, y la Corte de Apelaciones del Quinto Circuito de EE.UU. en New Orleans mantuvo la decisión. Se espera que la corte alta, la cual anunció el 19 de enero su intención de tomar el caso, emita un fallo para principios del verano, de acuerdo a CNN.
Los nueve jueces les pidieron a ambos lados que hablen sobre si las acciones de Obama violan la provisión de la Constitución de que el presidente debe “tener cuidado de que las leyes sean fielmente ejecutadas,” reportó el Wall Street Journal.
La vocera de la Casa Blanca Brandi Hoffine dijo que la administración está “complacida de que la Corte Suprema haya decidido revisar el caso de inmigración.” Ella expresó confianza en que la corte fallará a favor de “los inmigrantes que deseen estar a cuentas, registrarse, pagar impuestos y contribuir a nuestra sociedad abierta y honestamente,” reportó el Journal.
Los bautistas del sur, reflejando al resto de la nación, difieren sobre el balance apropiado entre seguridad y compasión en la política de inmigración. La última vez que la Convención Bautista del Sur habló de inmigración fue en 2011, cuando una resolución “sobre inmigración y el evangelio” llamó tanto a la compasión hacia los inmigrantes como a la seguridad de la frontera. Los mensajeros a la reunión anual de la CBS en Phoenix ese año adoptaron una resolución a la que Baptist Press estimó en ese tiempo como una mayoría de 70 a 80 por ciento.
La resolución señaló que “nuestro Señor Jesucristo vivió sus años de niñez como un emigrante y refugiado” y destacó las exhortaciones de las Escrituras “a mostrar compasión y justicia por los residentes temporales y extranjeros en medio de nosotros.” La declaración también pidió a nuestras autoridades gubernamentales darles prioridad a los esfuerzos de asegurar las fronteras.”
Una moción para enmendar la resolución afectando su llamado “a un camino justo y compasivo al estatus legal” fue derrotada por un margen de 51-48. Los mensajeros sí enmendaron la resolución, a sugerencia del Comité de Resoluciones de la CBS, para establecer: “Esta resolución no debe ser interpretada como apoyo a una amnistía para ningún inmigrante indocumentado.”
