WASHINGTON (BP) — La administración Obama ha ondeado la bandera blanca en la guerra a las drogas al decidir no rebatir las leyes estatales que legalizan la marihuana para el uso recreativo, dice un bautista del sur experto en política pública.
El Departamento de Justicia anunció el 29 de agosto que no rebatiría la iniciativa del 2012 de los votantes que legalizaron pequeñas cantidades de marihuana para el uso recreativo en los estados de Colorado y Washington, los cuales se convirtieron en los primeros en autorizar la droga para uso no medicinal. Veinte estados y el Distrito de Columbia han legalizado el uso médico de la marihuana.
El decreto de la administración Obama es “extremadamente perturbador,” dijo Barrett Duke, vicepresidente de política pública de la Comisión de Libertad Religiosa y Ética (ERLC por sus siglas en inglés).
“Que dejen a los estados establecer sus propias leyes sobre el uso de drogas es un indicador de su rendición en la guerra contra las drogas,” dijo Duke sobre la administración. “Todos los otros estados de la unión deberían estar preocupados sobre la arbitraria negligencia del gobierno federal hacia las leyes federales sobre drogas y por la amenaza que posee en su habilidad de prevenir el incremento del uso de drogas en sus propios estados.”
En un memorándum a todos los procuradores de EE.UU., el Departamento de Justicia dijo que la marihuana todavía es una droga ilegal bajo la Ley de Sustancias Controladas (CSA por sus siglas en inglés), ley de 1970 sobre la política federal de drogas. El departamento instruyó a sus procuradores a continuar aplicando la CSA en relación con la marihuana con base en las ocho prioridades establecidas en años recientes. Esas prioridades incluyen la prohibición de la distribución de marihuana a menores de edad y la prohibición a los carteles y las pandillas a lucrar con la venta de las drogas.
Por otra parte, el gobierno federal dependerá de los estados y las autoridades locales para que implementen sus propias leyes en relación a la marihuana, de acuerdo al Departamento de Justicia.
El departamento dijo que les ha dicho a los gobernadores de Colorado y Washington que eso no rebatirá la legalización de la marihuana de sus estados. Los procuradores federales, sin embargo, encausarán a los individuos, si Colorado y Washington no regulan estrictamente la posesión, producción y distribución de la marihuana, de acuerdo al departamento.
Además de Duke de la ERLC, otros oponentes a la legalización de la marihuana criticaron la acción de la administración Obama.
Una coalición de organizaciones del cumplimiento de la ley expresaron “extrema decepción” por la negación del Departamento de Justicia a rebatir las leyes en Colorado Washington.
La acción “ignora las conexiones entre el uso de la marihuana y el crimen violento, los potenciales problemas de tráfico que pueden crearse en el estado y en las fronteras locales como resultado de la legalización, y el potencial económico y los costos sociales en que se podría incurrir,” de acuerdo a una carta del 30 de agosto del liderazgo de las organizaciones, que incluyen la Asociación Nacional de Alguaciles y la Asociación de Jefes de Policía.
El uso de la marihuana está involucrado en muchas de las 8.000 muertes al año por accidentes automovilísticos relacionados con conductores que están bajo la influencia de las drogas, o “muertes por manejar bajo los efectos de la droga,” dijo la coalición.
Las organizaciones del cumplimiento de la ley también criticaron al Departamento de Justicia por no consultar con ellos. Dijeron que la decisión de no rebatir las nuevas leyes estatales “es una invitación abierta a que otros estados legalicen la marihuana en desafío a la ley federal.”
El excongrecista demócrata Patrick Kennedy dijo en una declaración escrita: “Podemos esperar más accidentes por manejar bajo los efectos de la droga, más deserción escolar, más resultados en pobreza de la salud cuando la nueva gran industria de la marihuana se dirija a los niños y las minorías emerjan para avivar el fuego.”
Kennedy es presidente de Proyecto SAM (SAM son las siglas en inglés de Acercamiento Inteligente a la Marihuana).
Los defensores de la legalización de la marihuana recibieron con agrado el anuncio del Departamento de Justicia.
Dan Riffle, director de políticas federales para el Proyecto de Política de la Marihuana, llamó la acción “un gran e histórico paso hacia la finalización de la prohibición de la marihuana.”
“La decisión del Departamento de Justicia de permitir la implementación de las leyes en Colorado y Washington es una clara señal de que los estados son libres de determinar sus propias políticas respecto a la marihuana,” dijo él en una declaración escrita.
Entre las provisiones de las leyes de Colorado y Washington está el permiso para que los adultos mayores de 21 años posean hasta una onza de marihuana.
El presidente Obama indicó a finales del año pasado que su administración probablemente no rebatiría las leyes aprobadas en noviembre por los votantes de los dos estados.
“Tenemos cosas más importantes que atender,” le dijo Obama a ABC News en diciembre. “No tendría sentido que viéramos como una prioridad el perseguir a los consumidores recreativos en estados que han determinado que eso es legal.”
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Con reportes de Erin Roach, editora asistente de Baptist Press. Tom Strode es el jefe de la oficina en Washington para Baptist Press.
