CHICAGO (BP) — En cuanto uno entra a Uptown Baptist Church en Chicago uno se da cuenta que esta congregación bautista del sur se preocupa por las naciones. Pero dicha preocupación no sólo está escrita en los 27 idiomas nativos de los grupos étnicos locales que cuelgan de los 27 estandartes coloridos. Se demuestra en una historia continua de comenzar iglesias nuevas para alcanzar a estos grupos.
Incluso después de ayudar a plantar por lo menos 30 iglesias en Chicago en los últimos 35 años, Uptown tiene 6 iglesias étnicas que se reúnen en su edificio. La iglesia se asocia también con Dave Choi, un plantador de iglesias y su Church of the Beloved, una iglesia multicultural que lleva dos años en la Ciudad de los Vientos.
“La plantación de iglesias es la mejor manera de compartir el Evangelio y glorificar a Cristo,” dijo Michael Allen (@ubcreal), pastor de Uptown desde el 2005. “Creo que más y más pastores se están dando cuenta de este hecho: si queremos alcanzar nuestras ciudades, nuestro estado y nuestro país con el Evangelio, no hay una manera mejor.”
Chicago representa esta necesidad tan bien como otras ciudades. La ciudad cuenta con sólo una iglesia bautista del sur por cada 31,791 habitantes en el área metropolitana de Chicago. Los evangélicos conforman menos del 10 por ciento de la población del área.
El legado de plantación de iglesias de Uptown comenzó con su propia fundación como una iglesia nueva en 1976 a cargo de James Queen, oriundo de Chicago. “Tenía una carga por la gente de Chicago,” dijo Queen, en una cita tomada de su página de internet. “A inicios de mi vida cristiana me comprometí a ver que la ciudad fuera ganada para Cristo.”
En la década de 1980-90, dijo Allen, Queen y otros plantadores de iglesias notaron la creciente diversidad alrededor del barrio de la iglesia. Para poder alcanzar a estos diversos grupos étnicos, la iglesia comenzó iglesias –- o abrió su edificio para que otros lo usaran — que hablaban el idioma de la gente.
“Nuestra estrategia de plantación de iglesias se diversificó cuando nuestra comunidad se diversificó,” dijo Allen. “Mucho antes que la Junta de Misiones Internacionales (IMB) tuviera la estrategia de adoptar grupos étnicos en el extranjero, nosotros ya estábamos adoptando grupos étnicos aquí mismo en nuestro barrio porque seguían viniendo. Dios los estaba trayendo a nuestras puertas.”
Ahora la iglesia emplea una nueva estrategia para alcanzar a las naciones presentes en Chicago –- asociarse con una plantación de iglesia intencionalmente multicultural.
“Hoy en día pienso que es importante mezclarse más desde el principio y comenzar más multiculturalmente que segregando a las iglesias de acuerdo a su idioma y grupo cultural,” dijo Allen.
Incluso en el presupuesto de una iglesia urbana con una asistencia promedio de 180, Uptown contribuye con los recursos que puede para Church of the Beloved. La iglesia también apoya a la plantación de iglesias a través de la oración, ánimo y gente cuando los necesitan.
Por ejemplo, Choi, que es soltero, se dio cuenta de la necesidad de proveer orientación y consejería para las parejas de su iglesia. Allen y su esposa ofrecieron un tiempo de orientación y convivencia en el verano y en su casa para las parejas de Church of the Beloved que estuvieran interesadas.
Tenemos muchas parejas jóvenes en nuestra iglesia,” dijo Choi. “Ha sido grandioso tener tal recurso de una iglesia con parejas mayores que tienen hijos. Ha sido una asociación que nos anima. Sabemos que podemos apoyarnos en ellos cuando los necesitamos porque nos han mostrado tanta disposición para servirnos.”
La iglesia también ha sido consistente en su aportación a las misiones cooperativas de los bautistas del sur. La iglesia contribuye el 12 por ciento de su presupuesto para las misiones, lo cual incluye al Programa Cooperativo y a la Asociación Bautista del Área Metropolitana de Chicago.
Allen ve la participación de su iglesia en la plantación de iglesias como parte de un ciclo que comenzó cuando los bautistas del sur ayudaron a comenzar Uptown y jugaron un papel importante en conseguir un edificio para la iglesia en sus inicios.
“Formar parte de una plantación de una iglesia muestra que somos mayores que nosotros mismos,” dijo Allen. “Somos mayores que lo que hacemos en nuestra esquinita del mundo. Así que anímense y participen en lo que es un movimiento nacional y de la dirección nacional de nuestra denominación. Nuestra iglesia ha sido tan bendecida a través de los años por nuestra propia denominación que queremos jugar en equipo y retribuir y servir.”
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Tobin Perry escribe para la Junta de Misiones Norteamericanas, NAMB.
