JINOTEGA, Nicaragua (BP) — Barrett Jones, de casi dos metros de estatura y 136 kilos, jugador de fútbol americano de la Universidad de Alabama sobresaldrían en cualquier lugar.
Sin embargo, su amor por Dios y su compromiso para compartir el evangelio también lo hacen sobresalir entre la mayoría de sus compañeros.
“No quiero ser conocido como el futbolista que por casualidad es cristiano, quiero ser conocido como el cristiano que por casualidad juega futbol americano,” dijo Jones.
Miembro por largo tiempo de Bellevue Baptist Church de Cordova, Tennessee, cerca de Memphis, Jones organizó y dirigió un equipo de 31 de sus amigos y miembros de su familia en un viaje misionero a Jinotega, Nicaragua, durante las vacaciones de primavera, del 11 al 16 de marzo.
El equipo participó en varios servicios nocturnos de avivamiento en la Iglesia Bautista Shalom en Jinotega y visitó tres escuelas públicas y un orfanatorio. En cada lugar, dieron sus testimonios personales, presentaron la historia del evangelio e interactuaron con los niños en deportes y partidos y simplemente reflejaron el amor de Dios.
Jones, de 21 años, estableció sus prioridades en su testimonio en el servicio de reavivamiento en la Iglesia Shalom el 13 de marzo.
“Esta noche, quiero hablarles un poquito acerca de lo que realmente me apasiona,” le dijo a la multitud, “y no es el futbol americano — es Jesucristo.”
Este es el tercer viaje misionero que Jones ha organizado y dirigido — las dos pasadas vacaciones de primavera llevó equipos misioneros a Haití donde construyeron baños para los refugiados, pintaron el edificio de una escuela y construyeron una cancha de baloncesto.
“Me encanta este viaje [a Nicaragua] porque todo se trata de presentar el evangelio — es el principal propósito,” dijo Jones. “No es construir una escuela — esos también fueron grandes viajes.
“Pero este es el tipo de viaje más importante,” dijo Jones, “… presentar el evangelio. Este viaje podría tener un efecto eterno, esperanzadoramente, en la vida de algunas personas.”
Jones ha recibido una impresionante lista de honores, galardones académicos y atléticos y de servicio comunal. Se graduó con honores en tres años de contabilista en la University Honors Program. Jugará la cuarta temporada en la Alabama Crimson Tide como estudiante de posgrado en contabilidad.
Él está involucrado en la Cruzada Estudiantil y Profesional para Cristo en el Compañerismo de Atletas Cristianos. En 2011, su proeza en el futbol fue reconocida con el Trofeo Outland como el más sobresaliente guarda-línea interior entre los 25 equipos All-America, el Trofeo Wuerffel por servicio comunitario ejemplar además de logros académicos y atléticos, NCAA Unánime All-American y la beca 2011 SEC Atleta del año.
Entre clases, estudio, entrenamiento de futbol y juegos, las vacaciones de primavera son el único tiempo libre que Jones tiene durante el año.
“[La gente siempre] dice: ‘Hombre, es asombroso que estés renunciando a las vacaciones de primavera para ir a un viaje misionero,’ y yo les digo: ‘No estoy renunciando a nada.’
“Esto es lo más divertido que he tenido… ir a un viaje como este y experimentar esto con cristianos que piensan como yo y difundir el evangelio, eso es lo que me encanta hacer, y no solamente lo digo por decir.
“He ido a la playa millones de veces,” dijo Jones, “y realmente no recuerdo un viaje en especial. Sin embargo, recuerdo cada segundo y cada día de cada viaje misionero en el que he estado.”
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Laura Fielding escribe para la Junta de Misiones Internacionales.
