NUEVA YORK (BP) — El Departamento de Educación de la Ciudad de Nueva York ganó una apelación de última hora para que las iglesias no tengan reuniones de alabanza en las escuelas públicas, revocando justo unas horas antes los permisos previamente otorgados para que las congregaciones tuvieran la oportunidad de reunirse el domingo, según estaba programado.
[QUOTE@left@180=‘Excluir solamente a estos grupos está mal.’ –- Asambleísta de Nueva York, Nicole Malliotakis]Un panel de la Corte de Apelaciones de los EE UU para el Segundo Circuito falló la noche del viernes (17 de febrero) a favor de una orden temporal de restricción emitida el día anterior por un juez de la corte de distrito y aplicada solamente a Bronx Household of Faith –- los demandantes en una larga batalla legal — y no así a otras iglesias.
“El Departamento de Educación está legítimamente preocupado porque las escuelas públicas están siendo afiliadas con una práctica o creencia religiosa en particular,” dijo Jane Gordon, una abogada para la ciudad, según reportó The New York Times.
Las iglesias fueron notificadas, por medio de un correo electrónico enviado a aproximadamente las 9:30 pm la noche del viernes, que no se les permitiría reunirse el domingo, tal como estaba programado, dijo a Baptist Press Ray Parascando, pastor de Crossroads Church en Stanten Island, N.Y.
Crossroads había recibido ese día un permiso del sistema escolar para reunirse otros dos domingos, luego que la Juez Loretta Preska de la Corte de Distrito de los EEUU para el Distrito Sur de Nueva York otorgara una prórroga de 10 días mientras que la corte revisaba el caso.
Parascando planificó permanecer parado afuera de la P.S. 52, donde Crossroads se reunió por más de cuatro años, y decir a la gente que no podían regresar el domingo ya que la ciudad había bloqueado su acceso al predio.
“Hay numerosas personas que no tienen Facebook ni correo electrónico, que no son genios de los medios de comunicación, y simplemente van a venir el domingo porque es lo que acostumbran hacer — porque eso es lo que comunicábamos ya que teníamos un permiso,” dijo Parascando.
“Hay gente que presupuesta justo lo necesario para ir al trabajo y a la iglesia [usando el transporte público], y hay gente que de hecho anhela ir a la iglesia para ser animados,” dijo el pastor. “Así que sentí que eso era un total desdén por las cosas de Dios.”
Alliance Defend Fund –- el cual está representando a Bronx Household of Faith — expresó optimismo acerca de que la Juez Preska ampliara el fallo, aplicándolo a todas las iglesias.
“Esperamos que la Juez Preska emita un requerimiento inicial preliminar durante la próxima semana, y se debe aplicar a todos los grupos religiosos que deseen reunirse para tener servicios de alabanza en las escuelas públicas de la Ciudad de Nueva York,” dijo Jordan Lorence, consejero principal de ADF, en una bitácora por internet.
El domingo por la tarde, Crossroads sostuvo una conferencia de prensa en frente de la escuela y varios oficiales públicos estuvieron presentes para mostrar su apoyo. Esa tarde, se reunieron en otra iglesia para tener su servicio de alabanza.
“Nos sorprendió la manera en que tantas iglesias estaban dispuestas a hospedarnos y abrirnos sus puertas,” dijo Parascando.
Durante el servicio de alabanza de Crossroads el domingo por la tarde, varios pastores locales le pidieron que hablara.
“Ellos dijeron que nos apoyan, que eso está mal, que cuando el alcalde y la ciudad persiguen a Crossroads, ellos también sienten la persecución, y cuando todos estamos siendo perseguidos, Cristo está siendo perseguido,” relató Parascando.
“Uno por uno, dieron una ofrenda de amor. Pensé que era un momento realmente poderoso de las iglesias apoyándose las unas a las otras.”
Parascando también recibió un mensaje de texto ese día de parte del pastor de Crossroads Church en Newnan, Ga., una congregación hermana bautista del sur, diciéndole que la iglesia había estado orando por ellos. Crossroads Newnan había recolectado una ofrenda de amor de casi $15,000 para Crossroads Staten Island, dijo Parascando.
La iglesia de Nueva York consideró el regalo inesperado como una provisión del Señor. Antes de enterarse del más reciente acontecimiento en la larga batalla, Parascando había planificado predicar esa noche un sermón titulado “Donde Dios guía, Él provee” con base en el Salmo 23.
“Así que realmente sentimos el poder del Espíritu Santo presente incluso cuando no estábamos en nuestro propio edificio… a pesar de que nos echaron al frío,” dijo Parascando. “Sentimos que había sido uno de los servicios más poderosos que hayamos tenido.
“La Biblia es muy clara: Bienaventurados aquellos que son perseguidos. Obviamente no estamos pasando una persecución del tamaño de la que pasan aquellos cuyas vidas están en peligro en partes remotas del mundo, pero esto es más el tipo de persecución americana.”
Crossroads es una iglesia de personas clase media baja, dijo Parascando, y esperan mudarse muy pronto a un teatro abandonado con un costo de renta de $6,500 más al mes que lo que pagaban en la escuela. Tendrán que confiar en Dios para proveer las finanzas, dijo el pastor.
A pesar de las dificultades, Crossroads recibe consuelo de las iglesias por toda la nación que oran por ellos y otras congregaciones en Nueva York.
“Hubo gente que me escribió correos electrónicos diciendo que estaban orando por nosotros. Creo que el enemigo quiere usar esto para dividirnos y Dios lo está usando para unificarnos,” dijo Parascando.
Nicole Milliotakis, asambleísta de Nueva York, y quien habló en la conferencia de prensa de Crossroads el domingo, dijo que el Departamento de Educación está enfocándose injustamente en las instituciones religiosas que tienen el mismo derecho que cualquier otro grupo para alquilar los espacios públicos.
“Excluir solamente a estos grupos está mal,” dijo Malliotakis. “Estas organizaciones contribuyen en el entretejido de nuestra comunidad a través de sus actos de servicios voluntarios y caridad. Su maltrato por la ciudad es injusto, y una afrenta para el principio básico de libertad religiosa de nuestra nación.”
El Miembro del Concilio de la Ciudad de Nueva York, Fernando Cabrera, quien ha estado hablando a nombre de las iglesias, dijo que algunas congregaciones no tienen ningún lugar a donde ir ahora que no pueden reunirse en las escuelas.
“¿Qué es mejor? ¿Tener grupos religiosos en las aceras y en los parques o que paguen dinero a la ciudad para reunirse dentro de los edificios vacíos de las escuelas?” dijo Cabrera. “Esta política es simplemente ridícula. Albany debe hacer algo.”
De firmarla el gobernador, se paralizaría la legislación en la Asamblea estatal que derogaría al Departamento de Educación.
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Erin Roach es el editor asistente de Baptist Press.
