WASHINGTON (BP)–El movimiento a favor de la vida sigue progresando, pero enfrenta una crucial coyuntura dentro del devastador régimen del aborto que lleva 35 años en los Estados Unidos de América.
Esa es la opinión de los dos líderes políticos de la campaña para finalizar el aborto legalizado, en el momento en que se acerca otro aniversario del caso Roe contra Wade. El 22 de enero es la 35ª observancia de un par de opiniones de la Corte Suprema, encabezada por Roe, que aniquiló todas las prohibiciones estatales en contra del aborto y legalizó el procedimiento a través de todo el embarazo por prácticamente cualquier razón.
Cada año durante el aniversario, aquellos a favor de la vida se reúnen por decenas de miles en la capital del país para lamentar el homicidio de lo que hoy día casi llega a 50 millones de bebés y el daño ocasionado a millones de mujeres, mientras oran y marchan para que cese esa violencia. Mientras tanto, en un número comparativamente menor los defensores del derecho al aborto celebran los veredictos de 1973.
Ambos lados lo harán este año a sabiendas que un nuevo presidente será elegido en noviembre, un suceso que probablemente ejercerá un gran impacto en la Corte Suprema.
Es una “muy importante bifurcación en el camino” dijo Douglas Johnson, director legislativo del Derecho Nacional de la Comisión de Vida. “Hay cosas positivas que señalar, pero también reconocemos las nubes en el horizonte” ya que todos los candidatos del partido demócrata están comprometidos con los derechos al aborto, dijo.
“En el 2008, escucharemos mucho que hablar de parte de los nominados demócratas acerca de la corte” acerca de cómo dos o más jueces pueden ser reemplazados en los próximos cuatro años y el futuro de Roe será determinado, “y eso es correcto,” dijo Johnson.
Las nominaciones a la Corte Suprema por un presidente que respalda el derecho al aborto “podrían ser usadas para solidificar una mayoría a favor del aborto que podría perdurar muchos años,” le dijo Jonson a Baptist Press. “Uno podría imaginar una corte que llegara inclusive a extremos mayores” como sería invalidar la enmienda Hyde, añadió. Esa medida, decretada en 1976, prohíbe que Medicaid y otros fondos federales se usen para practicar abortos.
Un aspecto apaciguante de la situación de la Corte Suprema para los seguidores del movimiento a favor de la vida es que los jueces mayores favorecen a Roe.
Si los Estados Unidos de América elige “en el 2008 a un presidente que esté a favor de la escogencia o favor del aborto, esa persona probablemente tendría que hacer por lo menos dos designaciones a la Corte Suprema. Ahora, con toda probabilidad, reemplazarán liberales con liberales, lo cual no será tan catastrófico para la causa a favor de la vida, aunque decepcionante y dilatoria para la invalidación de Roe,” dijo Richard Land, presidente de la Comisión de Libertad Religiosa y Éticas de los Bautistas del Sur.
“En esta situación, si se reemplazan las siguientes dos designaciones (jueza asociada Ruth Bader) Ginsburg y (John Paul) Steven, aun si ellos son reemplazados con liberales, ustedes todavía están solamente 5 a 4 (en un pronosticado voto de invalidación de Roe), y solamente se necesita uno más para llegar adonde necesitan llegar,” le dijo a BP.
La elección de un presidente a favor del derecho al aborto y la subsiguiente nominación para reemplazar a los del mismo parecer “no sería tan catastrófico como estar 6 a 3, pero sería un significativo revés, especialmente cuando reconocen que estamos tan cerca,” dijo Land. “Si en el 2008logramos poner a un republicano a favor de la vida en la Casa Blanca, la realidad es que es muy probable que ustedes obtengan uno o tal vez dos votos, dada la actuarial bancada.”
Si Roe es revocada, el asunto volverá a los estados, donde Land predice “seguramente cerca de 40 estados pasarán significantes y restrictivas” leyes sobre el aborto.
Los Estados Unidos, dice Land, “se está moviendo fuertemente en una dirección a favor de la vida, y tenemos toda la razón para creer que continuará así.”
“El movimiento a favor de la vida está ganando la batalla para obtener los corazones y las mentes. No hay duda sobre esto,” a pesar “de tener prácticamente todas las elites y prácticamente todos los sectores de las opiniones seculares de la sociedad inquebrantablemente opuestos a ello,” dijo.
Estas ganancias están demostradas, dijo Land, en:
— La elección desde 1980 de tres presidentes, cada uno por ocho años, que apoyaron las políticas a favor de la vida;
— Las encuestas de opinión pública que muestran “significativamente que más de dos tercios de la población se opone a la mayoría de las razones por las que la mayoría de la mujeres se practican abortos;”
— La creciente evidencia de los desórdenes de stress post-traumático en mujeres que han tenido abortos, está ayudando a la sociedad a verlas a ellas como víctimas también;
— La tendencia de los jóvenes a tener más probablemente una visión de apoyo a la vida, “parcialmente debido a que los adultos a favor de la vida tienen a sus hijos y los crían para que estén a favor de la vida, y los adultos a favor de la escogencia por lo general no tienen hijos.”
“Creo que si alcanzo a tener una longevidad normal, lo que significa que me quedan unos 20 años por vivir, veré Roe anulada,” reconociendo, sin embargo, “que hay cosas que podrían perderse o considerablemente postergarse lo cual sería la inevitable victoria del movimiento a favor de la vida.”
“Nada es más seguro en la vida que la muerte, los impuestos y el regreso del Señor,” dijo.
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Tom Strode es el jefe de la oficina de Baptist Press en Washington.
